El PSG ya es historia en esta edición de la Champions. O lo que es lo mismo, Mbappé ya está, otra vez, fuera de la máxima competición europea a las primeras de cambios. Los parisinos ya no tienen opciones de ganarla y, al mismo tiempo, el delantero francés ve como ya es el dueño de su destino. Si los franceses ganaban esta edición de la Copa de Europa, automáticamente el contrato de Kylian se extendía hasta 2025, pero con la situación actual, el único que puede decidir si lo prolonga o no será el jugador.
La decepción de Mbappé es mayúscula. Mbappé ha tenido opciones de cambiar el destino de su equipo en la Champions. En París, cuando saltó tocado en la segunda mitad, hizo saltar por los aires a la zaga del Bayern. De hecho, marcó un gol que suponía la igualada, pero quedó anulado. En Múnich, estuvo lejos de su mejor nivel. Y de todo esto, desde Valdebebas han estado muy pendientes.
En el Real Madrid han observado como el PSG volvía a fracasar en Europa y Mbappé con ellos. De hecho, en la cúpula madridista hubo intercambios de mensajes con el primer gol del Bayern. En el club ya saben que sólo Kylian será el responsable de decidir si quiere seguir defendiendo los colores de la entidad parisina hasta 2025 o, por el contrario, decide hacer las maletas en el 2024. Algo que esperan en la casa blanca y que se conocerá a final de la presente temporada. Si el delantero dice «no» a la posibilidad de ampliar su vinculación, la maquinaria madridista se terminará de activar para intentar que sus caminos se unan por tercera vez. En las dos primeras no fue posible por deseo del jugador.
Nadie le cierra la puerta
Como contó OKDIARIO, a pesar de todo lo que ha pasado con Mbappé, en el Real Madrid reconocen que está llamado a ser el mejor jugador del mundo junto a Vinicius en la próxima década y nadie se atreve a cerrarle la puerta. «Si tiene que venir y se ajusta a los criterios del club, vendrá», aseguran desde la cúpula.
En el Real Madrid, en estos momentos, no se plantean abordar su fichaje en el verano de 2023, salvo que se dé la oportunidad sea irrechazable. El plan pasa por esperar y en enero de 2024, si decide no ampliar su contrato, repetir los pasos dados a comienzo de 2022, pero con el deseo de que esta vez sea la definitiva.
Lo que ahora mismo tiene claro el Real Madrid es que no se sentará a hablar con el PSG por el futuro de Mbappé. Las relaciones entre ambos clubes están rotas y no es el momento de ponerse a negociar ningún fichaje. Ya no lo hicieron el pasado verano, cuando esperaron que el jugador saliese gratis una vez concluido un contrato que terminó renovando. Ahora, la situación sería la misma.
Mientras, Mbappé, a través de terceros, hace ver al Real Madrid que se equivocó en su decisión. De momento, ya se ha quedado sin Champions y parece complicado que el camino del PSG sea el correcto. No obstante, los blancos se mantienen fríos y esperan acontecimientos, pero lo que tiene clara la cúpula es que, si quiere, el tren del Real Madrid pasará otra vez por su puerta.